Tiempo estimado de lectura: 4 minutos
Un demonio es un ser sobrenatural, también conocido como diablo o ser maligno. Hay muchos indicios de que la mitología hebrea atribuía a los demonios una cierta independencia, un carácter malévolo propio, porque se creía que procedían, no de la morada celestial de Yahvé (Yhwh), sino del mundo inferior. En su mayoría, los demonios eran trabajadores del daño. A ellos se les atribuyeron varias enfermedades, particularmente las que afectan el cerebro y las partes internas. Por lo tanto, había un temor constante sobre estas criaturas.
Pero los demonios no siempre fueron malvados si nos remontamos a civilizaciones más antiguas que la hebrea. En la Mitología Sumeria y en general en Mesopotamia, los demonios eran creados por los mismos dioses, con el fin siempre de solucionar algún problema o disputa que podía haber en el consejo de los dioses. Por poner un ejemplo, en el «Descenso de Inanna a los Infiernos», el dios creador de la humanidad Enki, crea a dos demonios, el Kurgarra y el Galatur, estas criaturas tendrán que liberar a la diosa del amor de la Soberana de los Infiernos, Ereshkigal.
[toc]
Demonios en la mitología Hebrea
¿Qué significa ser un demonio?
La palabra inglesa ‘demonio’, entendida como espíritu maligno, deriva de la palabra griega ‘daimon’ que significaba simplemente ‘espíritu’. En el ámbito de las creencias espirituales, se cree que los demonios, actúan a través de las personas bajo la forma de la posesión, y por lo tanto, pueden impulsarles tanto a la creación como a la destrucción, tanto para bien como para mal.
En la historia de las religiones hay un tema que nos despierta siempre curiosidad, se trata de los «Ángeles Caídos». Se dice que fueron los primeros ángeles que Dios creó, pero se alejaron y se rebelaron contra él. Fueron desterrados del cielo y enviados al infierno. La primera fuente que se habla sobre ellos es en el “Libro de Enoc”, una antigua obra atribuida al bisabuelo de Noé.
En este documento relata información sobre el origen de los demonios y los gigantes. Los antiguos ángeles fueron creados para salvaguardar al hombre y velar por él. Dios les dio libertad y capacidad para entender su alrededor, esto hizo que estos seres comenzasen a cuestionar a su creador y empezaran a alejarse de él. Cometieron varios pecados y Dios decidió expulsarlos del cielo, desterrándoles al infierno.
Referencias
- Marcial Pons (2004). El Diablo en la Edad Moderna. Editorial: Ediciones de Historia. ISBN: 9788495379870.
- Smith, Peter (2008). An Introduction to the Baha’i Faith. Cambridge: Cambridge University Press. p. 112. ISBN 978-0-521-86251-6.
- Agustín de Hipona. «Of the Opinion of the Platonists, that the Souls of Men Become Demons When Disembodied». City of God, ch. 11.
- Jewish Encyclopedia Demonology.
- Érica Couto Ferreira (19 Octubre 2020). Infierno: El más allá en la Mesopotamia Antigua. Editorial: Aurora Dorada. ISBN 8412183118.